Costumbres dominicanas que solo perduran en los campos del Cibao
Costumbres dominicanas que solo perduran en los campos del Cibao
Hay lugares donde el tiempo avanza lento, con una extraña cautela, cual si temiera borrar lo que aún vive en montes y senderos terrosos. En la República Dominicana, este sitio tiene un nombre, un alma: el Cibao. Una tierra próspera, de habla musical y costumbres tenaces, el Cibao no es solo una región: es el centro cultural de la nación. Y en sus campos, esos pueblitos donde el gallo aún anuncia el amanecer, subsisten prácticas, rituales y hábitos que el siglo XXI parecería haber olvidado. Allá, mientras el bullicio urbano se pierde entre montañas, perdura un estilo de vida entretejido con hospitalidad, fe y alegría. Son tradiciones que no encajan en museos, pues siguen vibrantes, latiendo entre cafetales, patios y fiestas patronales. 🤝 El saludo que aún perdura: la cortesía cual herencia En las calles polvorosas de los campos cibaeños, nadie es un desconocido. Saludar es casi un rito. “¡Dios le bendiga!”, “¡Adiós, compai!”, “¡Buen día, vecina!”... esas frases, sencillas pero profundas,…